Rafael Amargo. Dionisio. Festival de Teatro Clásico de Mérida
Foto: Festival de Mérida

¿Qué supone para ti pisar la arena del romano?

Pues la primera vez que fui me generaba una sensación de respeto increíble, mucho miedo y apretarme los machos.

Ahora, que vengo por tercera vez, afronto actuar en el Festival de Teatro Clásico de Mérida con mucha más certeza. Antes me daba miedo por lo que decían, pero ahora me da miedo por que ese miedo lo he vivido en mis carnes.

El Teatro Romano de Mérida no es un sitio para dudar sino que es un sitio para atreverse.

Rafael Amargo. Dionisio. Festival de Teatro Clásico de Mérida.

¿Por qué vuelves con un mito como Dionisio?

Es uno de los temas que nadie ha representado en el Festival de Mérida. Si te pones a mirar, hace más de 20 años que no se representa. Antígona, Medea, Fedra… todos los años hay una pero nadie repara en Dionisio porque es un semidios, un segundón pero que si te pones a estudiarlo era más listo y más protagonistas que todos. Era el hijo bastardo de Hera e invento las orgías y las bacanales. Era hijo de una madre humana, un bastardo.

¿Cómo ha sido el proceso creativo de Dionisio?

El dramaturgo Paco Ortuño me dijo que había un personaje de la mitología griega que “solamente tú puedes interpretar”. Yo le dije que eso no era así, que eso lo puede hacer cualquier actor que sea bueno, pero él seguía insistiendo en que tenía que ser yo. Empecé a estudiar y no me veía pero sí ¡resulta que soy clavado!

Este Dionisio habla en primera persona como si fuera yo. Habla de mi vida, que es tan real, que la gente va a pensar que es ficción. Al final, en Dionisio me interpreto a mí mismo. Esa es la gracia.

En tus espectáculos las artes plásticas juegan un papel fundamental ¿cómo has trabajado en este sentido?

En esta ocasión presento un trabajo a medias con Valiña Eyesberg Studio. José Vaaliña es el que está haciendo todos los efectos visuales para las mejores óperas de rock en Europa, la Fura dels Vauls. Me he asociado con él y este trabajo va llamarse Amargo-Vaaliña.

En ‘Dionisio’ me interpreto a mí mismo

Cuando veáis los audiovisuales vais a flipar. Vamos a trabajar con muppins y te adelanto que de repente, el Teatro Romano se verá congelado. Unas cosas… ¡Cimarro me ha dicho que ni en las Olimpiadas!

¿Cómo va a ser la puesta en escena?

Pues además de todo lo anterior me gustaría resaltar el vestuario de José Spain.

Ahora cuéntame qué pasa con la música, ya que traes a Alfred, a José Carrasco de Navajita Plateá…

La parte flamenca representa el alma canalla de Dionisio ¡Lo que es Rafael Amargo! Además, te voy a contar un secreto, voy a hacer un vino, ‘Sabor Amargo’, con las bodegas extremeñas Sani.

¿Qué tiene de especial tu Dioniso para que nadie se lo pierda?

Es una producción muy grande con una factura espectacular. Va a ser todo un derroche ¡Me lo quitan de la manos a Dionisio!

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