El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, reconoció la pasada semana en su comparecencia en el Congreso de los Diputados que «aún queda mucho por hacer” para mejorar el tren de Extremadura, puesto que «arrastra años de inacción» que han generado una falta de inversión de 665 millones de euros. Además en la citada comparecencia, el ministro comenzó su intervención “pidiendo disculpas a los viajeros afectados.
De todos modos, el ministro Ábalos declaró que confía en que los accidentes del tren extremeño disminuyan debido al paquete de medidas urgentes así como las de más a largo plazo, que se han adoptado en los últimos meses.
Asimismo, el ministro afirmó que gracias a estas iniciativas, los trenes en Extremadura no registraron incidencias durante el mes de diciembre. Aunque, como es sabido en el mes de enero ya ha habido 8, siendo la más grave la del día 1 en Navalmoral.
«Queda mucho por hacer, arrastramos años de inacción, pero desde el primer momento hemos actuado para evitar o reducir en lo posible las incidencias, y los resultados son ligeramente positivos», ha sentenciado con rotundidad Ábalos.
«Nuestro objetivo es que los extremeños tengan un servicio ferroviario adecuado, con normalidad y fiabilidad», ha asegurado en el Congreso.
Medidas urgentes
Para paliar la situación del tren de Extremadura a corto plazo, su Departamento ha sustituido once trenes, que un mecánico viaje a bordo del tren de que un mecánico viaje a bordo de los trenes para atender posibles averías, además de que los Talgo circulen con dos locomotoras.
Asimismo, también se han revisado los protocolos de actuación y atención e información de viajeros para los casos en los que ocurran incidencias.
Por último, hay previstas otras iniciativas a medio y largo plazo como son la construcción de un taller de mantenimiento de trenes en Badajoz o la licitación de inversiones para mejorar los tramos de vía.
Por otra parte, las obras del montaje para la vía entre Plasencia y Cáceres, que incluyen el ramal de conexión en Cáceres Norte, tienen con una inversión de 17.097.300 euros.
En total, la longitud de la vía es mayor a los 66 kilómetros. Casi 60 kilómetros ocupan el tramo principal y se montará en vía doble, que además contará con 3.595 metros de vía en placa en el túnel de Santa Marina.
Así, las obras tendrán la medida del ancho ibérico (1.668 mm) pero que permitirá el futuro cambio al ancho estándar gracias al empleo de traviesa polivalente. Este último ancho es el que se usa normalmente en las líneas de alta velocidad.
Además, se incluyen ramales anexos de vía única en Plasencia, Monfragüe y Cáceres Norte.
Por último, se van a instalar dos puestos de banalización (una instalación ferroviaria para que los trenes pasen de una vía a otra). Así,, la vía doble de alta velocidad podrá utilizarse indistintamente en ambos sentidos.