La Diputación de Cáceres, sigue en su afán de fomentar la cultura, tanto con sus Premios Literarios, los de Periodismo Dionisio Acedo o iniciativas en los pueblos con música en directo como Estivalia.
Además, este año, fiel a su cita veraniega, las noches de los viernes se llenan de ritmo en la capital cacereña con ‘Los Conciertos de Pedrilla’. A continuación, hablamos con uno de los platos fuertes del certamen, el asturiano Rodrigo Cuevas, todo un ‘agitador folclórico’ que no dejará a nadie indiferente.
¿Qué peso tiene en tu música la tradición oral, la música popular?
El mayor peso de todo lo que hay dentro del espectáculo. Me gusta mucho ir escogiendo las canciones. Voy escogiendo las canciones a través de cantares que encontré o que conozco y de ahí surge todo lo demás.
Además, bebes del cabaré de una verbena de pueblo ¿cómo haces para combinar esta amalgama?
Lo que yo vivo a gusto lo voy sacando. Saco las cosas que llevo en la mochila.
Además de la música, trabajas mucho la puesta en escena y la parte estética
Me gusta mucho toda esa parte que también pertenece a la tradición oral como son los chistes, los juegos, tanto orales y corporales, la danza tradicional… es todo parte de lo mismo y me gusta que esté presente en mis espectáculos.
Ver esta publicación en Instagram
Entonces, ¿serías capaz de resumirme tus referentes?
Buf, pues tengo muchos, pero los referentes más importantes para mi son las señoras, que están recogidas en el cancionero y son las guardianas de todo el arte popular. De lo que más bebo es de las señoras.
¿Cómo es el proceso de creación de un espectáculo de Rodrigo Cuevas?
Pasa por muchísimas fases. Primero está el proceso de investigación, la composición en casa, el estudio… además intento hacer una residencia artística para probarlo todo y luego ya estamos listos para girar.
Cuál es la clave para darle la vuelta a todo ese universo y transformar en el escenario toda esa tradición y convertirlo en diversidad
Utilizo las letras con las que me siento identificado. No intento darle la vuelta a nada. Cojo la tradición oral que me gusta, no la que me ofende.
¿Me adelantas algo de lo que podremos ver en Cáceres?
La música es de Manual de Cortejo pero combinada con teatro y con muchas historias y sorpresas por el medio. Además, voy con una banda de cuatro músicos y la escenografía es a base de unas fotografías antiguas que encontré en el ‘Museo del Pueblo de Asturias’, que son de fotógrafos asturianos y a partir de ahí hemos creado el escenario.
¿Por qué consideras que es importante continuar con iniciativas como Los conciertos de Pedrilla en plena pandemia?
Es lo que hay que hacer. Ya llevamos un año y pico programando cosas y hay que seguir. Afortunadamente, ya no es una singularidad y ya estamos concienciados.