Has hecho teatro, cine y televisión, ¿dónde te encuentras más cómodo?
En los tres. No tengo una preferencia, realmente va por momentos. Últimamente estoy haciendo más teatro, entonces le coges el gusto, y cuando haces más tele o cine también.
Sí que es cierto que el teatro tiene algo de cara al actor que se da, por así decirlo, el viaje completo del personaje de la historia o de los personajes que uno interprete, porque puede interpretar varios.
Podemos decir que el teatro es un viaje completo para el actor, mientras que el cine es completo para el espectador pero no para el intérprete porque se hace por tramos. Yo a veces comparo el teatro como si fuera una carrera de fondo, donde si te caes, te levantas y sigues. No hay ningún problema. No significa que ya hayas perdido la carrera.
El cine es como una carrera de velocidad. Es acción y corten. Tienes que ser muy preciso en todo, en los gestos, en la emoción… Y la tele ya sería una carrera de media distancia.
Cuéntanos algún secreto, ¿cómo se prepara Alberto Amarilla para un papel?
Primero hago una lectura de la obra de manera muy virgen, sin ningún tipo de acercamiento previo, por así decirlo. Sí que es verdad que cada personaje y cada historia depende, pero es cierto que hago un trabajo de documentación bastante fuerte.
Dependiendo del personaje, por ejemplo, hay personajes que te piden acercarte a ellos de una manera más interna y otros de una manera más externa.
¿En qué proyecto has experimentado el mayor desafío como actor?
Posiblemente en dos proyectos en concreto: uno fue un proyecto personal, ‘Re cordis’, y el otro, que lo estoy haciendo ahora mismo, ‘Lorca por Saura’, que es una función que habla de la vida de Federico García Lorca. Está interpretado por una mujer, India Martínez, mientras que yo interpreto a todos los personajes masculinos que pasaron a lo largo de la vida de Lorca, desde el padre de Lorca, pasando por Salvador Dalí, Luis Buñuel, Manuel de Falla, Fernando Ortiz, Carlos Gardel… En fin, que hay una infinidad de personajes. Eso sí que me ha permitido o me ha obligado a hacer precisamente ese trabajo del que tú hablabas antes.
Has trabajado con grandes talentos como Amenábar o Antonio Banderas; rodado películas como ‘Mar adentro’, ‘El camino de los ingleses’ o ‘Fuga de cerebros’, entre otras. Nos has comentado que estás inmerso en el proyecto ‘Lorca por Saura’. Háblanos un poco más sobre ello.
Para mí el proceso ha sido muy conmovedor porque era trabajar con Carlos Saura. Carlos Saura es historia de España e historia del arte universal porque era un artista multidisciplinar y que unía en todas sus creaciones varias disciplinas. Era un gran fotógrafo, un gran cineasta, un gran pintor… Puedo contarte una anécdota donde tuve que hacer, en un momento dado de Luis Buñuel. Entonces Carlos, me habló de Luis y de la amistad que tenía con él, por lo que pude saber cómo era Buñuel en sus diferentes etapa de la vida.
¿Le emociona más a un actor que le aplauda la gente de su tierra?
Sí, sí, sí, sí, desde luego que sí.
Recuerdo que hicimos la función de ‘Re cordis’ en el Gran Teatro de Cáceres. El Gran Teatro se llenó y, sinceramente, lo pasé mal. Me refiero a que es muy difícil actuar en casa porque creo que hay una presión emocional o fantasmas emocionales que aparecen. A pesar de todo, recibir un aplauso en casa es muy bonito.
El Premio Avuelapluma a las Artes Escénicas es para Alberto Amarilla.
Él dice que no sabe por qué le damos este premio. Fácil… Por reunir simpatía, talento y experiencia al servicio de las historias.#premiosavp #artesescenicas #teatro #Caceres @amarillaoficial pic.twitter.com/Z7tDGi1JIf
— Avuelapluma (@avpluma) May 4, 2023
Con toda tu trayectoria profesional, ¿qué supone para ti recibir el Premio Avuelapluma de Artes Escénicas?
Posiblemente no me lo merezca, hay muchísima gente fantástica en el mundo de las artes escénicas. Tengo una sensación personal interna en la que aún estoy aprendiendo.
Recibir este premio es como un abrazo de tu familia y eso es muy bonito.
Y para finalizar, ¿cuál es el camino que debe seguir un actor para triunfar desde Extremadura?
No sé si soy la persona más adecuada para hablar de esto. Yo me fui muy joven a estudiar Arte Dramático. Tengo muchos compañeros que están en Extremadura y que han generado todo un tejido y eso, personalmente, me produce una admiración hacia ellos sin límites.
De lo que sí puedo hablar es de que nunca he dejado de mantener el contacto con mi tierra y nunca ha dejado de hacer cosas aquí.
Para mí, la clave es no perder el contacto con tus raíces y eso es también parte de mi necesidad.
