Cambiar el pavimento del adarve de la muralla de Cáceres en su zona occidental, adecuar la Torre de la Yerba para hacerla transitable y abrirla al turismo, y reconstruir un tramo de cinco metros de la muralla en esta zona son algunas de las obras ha previsto el Ayuntamiento gracias a los 3 millones de fondos de recuperación del patrimonio que aportará el Ministerio de Turismo.
Completar el vaciado del Baluarte de los Pozos para hacer una «zona arqueológica viva» en la que convivan turistas y arqueólogos; adecuar la Cisterna de San Roque con intervenciones de limpieza, consolidación y eliminación; reforzar los componentes constructivos de los parámetros en grietas y fisuras de esta zona, e impermeabilizar la superficie, son otros de los proyectos que contempla esta iniciativa.
En el caso del adarve de Cáceres, que se encuentra en la parte occidental intramuros está prevista la retirada de los adoquines actuales. Después, se instalarán nuevas piezas de cuarcita de mayor tamaño además de eliminar objetos obsoletos en el pavimento, así como mejorar la red de saneamiento y la iluminación. Se trata del primer paso de un proyecto más ambicioso que, poco a poco, se extenderá a todo el recinto de la Ciudad Monumental para mejorar la accesibilidad intramuros a largo plazo.
El alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha explicado este miércoles las actuaciones que el pasado lunes adelantó en Baeza (Jaén) la ministra de de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto. Así, está prevista una inversión de 45 millones de euros en las 15 Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España para proyectos sostenibles de rehabilitación y mantenimiento de sus cascos históricos.
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Con respecto a la intervención en la muralla, en el tramo entre Torre de Bujaco y Torre del Horno, el regidor ha declarado que «no se verán contrastes tan bruscos respecto al estado anterior como hemos visto en la primera fase», ha dicho, en alusión a la recuperación del Baluarte de los Pozos, que ha cambiado ligeramente su fisionomía y color tras la intervención.
Salaya ha informado también que en esta zona la muralla está reconstruida en buena parte y las intervenciones se harán para conseguir estabilizarla y cerrar grietas pero «la imagen de la muralla, en su mayor parte, será parecida a como está ahora». «La Torre de Bujaco y el Arco de la Estrella no va a cambiar de color», ha aclarado. Además, ha incidido en que el objetivo es poder transitar por encima de la muralla en un tramo más amplio del que se hace ahora, que es hasta la Torre de los Púlpitos.
En este punto, y tras la pregunta de si se prevé la actuación de demoler las casas adosadas a la muralla en este tramo, tal y como recoge el documento del plan director redactado hace años, el alcalde ha descartado que se acometa esta actuación en este momento. «Yo me voy a meter en mucho líos pero no será en éste», ha sentenciado.
Finales de 2023
El resto de actuaciones previstas y enumeradas que están previstas empezarán en el último trimestre de 2023 y a completan así otras que se están llevando a cabo ya en el monumento almohade. Así, culminará la primera fase de rehabilitación, en la que se ha invertido más de un millón de euros con cargo al 1,5% cultural del anterior Ministerio de Fomento, o la segunda fase, cuyas obras comenzarán a mediados de 2022 y que recibirá una inyección de 1,2 millones también de fondos ministeriales.
Salaya ha subrayado que la rehabilitación de la muralla de Cáceres «se está haciendo a buen ritmo», pues ha recibido un impulso «importante». Además, el Consorcio Cáceres Ciudad Histórica ha realizado otras «pequeñas intervenciones» como la rampa en la plaza de San Jorge, por ejemplo.
En total y sumando los 3 millones que vendrán del Ministerio de Turismo, Cáceres va a destinar unos 6,3 millones de euros en cuatro años a la recuperación de su patrimonio a través de diferentes planes de inversión de diversas instituciones públicas.