Una de las mejores formas de construir un mundo mejor en favor de los derechos de la infancia es hacerlo a través del testamento solidario de UNICEF. De esta manera, una persona ya no esté podrá seguir dando vida a niñas y niños que necesitan una una educación digna, una alimentación saludable, salud y protección. Así, cualquier aportación, por pequeña que sea, será enorme, pues marcará la diferencia en las vidas de muchos menores. Los pequeños ahorros se convertirán en miles de vacunas contra la polio y el sarampión, en un coche en tratamientos contra la desnutrición aguda, en una casa o en la que más que necesaria escuela para educar a los niños y niñas. En definitiva, los bienes donados se podrá, en definitiva, posibilitar para miles de niños un futuro mejor.

Transparencia y colaboración

Hay que destacar que la gestión de todos los bienes que sean legados UNICEF asegura transparencia, eficiencia, colaboración con todas las partes así como el cumplimiento de las obligaciones legales y fiscales. Se garantiza que el destino de los fondos obtenidos irá a parar a los programas de UNICEF, según las prioridades en cada momento.

Así, los bienes inmuebles legados, serán tasados por una entidad oficial cuya cantidad marcada será la que se fije para su venta. Todos los gastos desde la adjudicación hasta la venta los sufragará UNICEF; los fondos de inversión o acciones se ponen a la venta en el momento más oportuno o de mayor rentabilidad; los bienes de valor especial, como joyas, cuadros…, se tasan y subastan por entidades oficiales; y el dinero en efectivo o en entidades financieras se ingresa en la tesorería de UNICEF.

Con respecto a los bienes de valor sentimental, como fotos, documentos, recuerdos… se entregan a los familiares o a personas que han cuidado al fallecido. Además, los artículos domésticos que son útiles, pero que carecen de valor económico o sentimental, son donados a una entidad benéfica de ámbito nacional.

Seguramente, nuestro nombre no aparecerá en los libros de historia, pero nuestra aportación será vital para la supervivencia y protección de miles de niños y niñas. Todos podemos conseguir que puedan tener una vida saludable, educación, nutrición y protección contra todo tipo de abuso y violencia. Más información en: 900 907 500 y testamentounicef.es.

FuenteAvuelapluma
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