Vida y pintura

Las crónicas de Cora
Cora Ibáñez

Crónica de la exposición de Vicente Macías Moreno

Encontrarte con la obra de Vicente Macías, es contemplar el arte en su estado más puro.

Combina la esencia de la antigua escuela, con la más absoluta improvisación, dotando a sus cuadros de unos contrastes en apariencia de luz y color que interfieren en nuestra percepción física y nos transportan hacia la sutil interpretación personal de sus creaciones. Refleja sus sensaciones en las escalas cromáticas de lo cotidiano, convirtiendo su realidad en las imágenes bellas que van desnudando sus pinceles, tomando vida y sugiriendo un protagonismo donde poco a poco se transforma en un cuadro, componiendo el equilibrio que resulta en su forma final.

Refleja sus sensaciones en las escalas cromáticas de lo cotidiano,…

El gesto de su pincelada, con personalidad, decidida, nos empuja a adentrarnos en el tema en el que trabaja con una pasión sin límite, desbordando y vertiendo su esencia en cada movimiento. Porque de eso se trata, del movimiento de la belleza. El que antepone ante los trazos pictóricos buscando su verdad, en contra de lo que sus ojos ven realmente, en múltiples ocasiones.

En su trayectoria existe cabida para todo tipo de técnicas; por eso, hablar de pintura con Vicente, es hablar de su realidad, sin la posibilidad de que una exista sin la otra. En ese amago de pensamiento en el que continuamente, se afana y lucha por salir desde sus pinceles al lienzo de la vida…

En esta exposición, en Las paredes del Gran Café de Cáceres, desgrana la forma de lo cotidiano y lo dota de un sentido más mágico si cabe y nos invita a pasear por sus calles y sus paisajes, fundiéndonos entre los detalles ocres de sus otoños, de la inmaculada pureza de sus formas, impregnándonos de ese oro sentimiento de sus sueños y meciéndonos en el trabajo preciso de su obra.