El pasado jueves celebramos la XI edición de los Premios Avuelapluma en los jardines del Museo Pedrilla, sin duda, uno de los espacios más bonitos de Cáceres.

Concedimos seis premios para loar lo bueno que tiene la cultura y el periodismo y lo fundamentales que son para una sociedad democrática. La pluma de hierro que entregamos Alberto, Gema, Julián, Inma, Manu y Susan es un símbolo de nuestro amor por la libertad creativa y el pensamiento crítico.

«En un mundo cada vez más comunicado, incomprensiblemente perdemos cada día cuotas de libertad”

Los Premios Avueluma se rigen por tres simples premisas: libertad, independencia y sentimiento. Y desde esas tres premisas elegimos a nuestros premiados, con total libertad, con plena independencia y con cariño porque creemos que sus proyectos, carreras y vidas tienen corazón, alma y rezuman libertad. Digamos, en lenguaje periodístico, que son historias que merecen ser contadas porque inspiran, motivas y sirven de acicate a la sociedad.

Porque aunque parezca mentira hoy en día, cada día, en un mundo cada vez más comunicado y cada vez más conectado, incomprensiblemente, perdemos cuotas de libertad y pensamiento crítico. Y como sociedad civil implicada en el desarrollo de nuestra ciudad no lo podemos consentir.

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