El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, ha señalado que en los próximos días convocará una reunión para definir las de actuaciones para definir las actuaciones lideradas por la ciudadanía, a las que se sumarían las instituciones, para protestar por la «eliminación» de la parada del tren Alvia en la localidad.
Así, Pizarro entiende que la explicación que ha hecho Renfe para «justificar» que el Alvia no pare en Plasencia es «tratar como ciudadanos de segunda a todo el norte extremeño».
Asimismo, a juicio del alcalde de Plasencia, el «intento» de «tapar» la «negligencia» de «eliminar» el tren de Plasencia poniendo autobuses supone «un agravio comparativo para el norte extremeño»,
Fernando Pizarro ha realizado estas declaraciones tras conocer la decisión de Renfe de incluir un servicio gratuito de autobuses para el traslado a la estación de Monfragüe. «Para que los demás viajeros ahorren media hora, a los placentinos nos incrementan 33 minutos de viaje», ha espetado, informa en nota de prensa el Ayuntamiento de Plasencia.
Toca firmar para que #Plasencia no quede aislada. Ya estamos hartos de que nos dejen a un lado. #TrenDigno #TrenDignoYa #Alvia #Ave que pare en #Plasencia capital del norte de #Extremadurahttps://t.co/WkQ3IZFozg
— Seraph Fennel XX (@SeraphFennelXX) June 25, 2022
Con todo esto, el primer edil placentino critica el aislamiento» que sufre la ciudad y la «falta de interés» por ésta, en tanto que «tras la eliminación del 50 por ciento de las conexiones que unían Plasencia con la capital y la privación de un servicio de alta velocidad, el norte extremeño queda una vez más sin posibilidad de tener buenas conexiones, tanto con la capital como con el resto de la comunidad autónoma».
De esta forma, Fernando Pizarro hace hincapié en la «imposibilidad» para viajar en un mismo día a ciudades como Mérida o Madrid debido a la «incompatibilidad» de los horarios.
A la vez, ha insistido en que la «inexistencia» y «deficiencia» de comunicaciones también afecta «notablemente» a la economía de Plasencia y al norte de Extremadura, porque «al tener que desplazarse a media hora de la ciudad para poder disponer del servicio ferrovial extremeño el desarrollo industrial y empresarial de todo el territorio se ve especialmente lastrado».
En este sentido, el alcalde ha subrayado que tras la inversión realizada en la obra de la estación «se esperaba que ésta fuese una estación de referencia para conseguir una mejor conexión con el resto de España, y como se ha visto no es así». Además, ha reiterado que Plasencia quiere las conexiones que tenía antes, centrando el objetivo en Madrid y el Ruta de la plata.
Para terminar, Pizarro argumenta también de que no se trata de una «queja política», sino que también compete a los colectivos en su mayoría empresariales, quienes «no han dudado en manifestar su disconformidad».