Carmen Núñez Cumplido
Directora General de Políticas Sociales, Infancia y Familia
En Extremadura el 35,2% de la población, algo más de 348.000 personas, estaban en riesgo de pobreza o exclusión social en 2015, ¿se han reducido estas cifras en 2016?
El índice AROPE refleja un descenso en 52.265 personas, un 4,6% con respecto al último año, lo que evidencia que se ha realizado un gran esfuerzo en la lucha contra la pobreza en este primer año de legislatura. No obstante, aún estamos por encima de la media nacional por lo que, y aunque nuestro fin último es erradicar las situaciones de riesgo y de precariedad económica, nuestro primer objetivo es no permanecer por encima de la media.
¿Con qué carencias y necesidades se encuentra actualmente la infancia?
Creo que las más importantes, que son las necesidades básicas, la educación y la atención sanitaria, ya han sido o están siendo acometidas por este Gobierno, mediante el aumento de becas, reposición de trasporte escolar, ley de medidas contra la exclusión, planes de empleo, el aumento de inversión en políticas sociales…. Y una vez solventadas éstas, que son primordiales, hay que acometer otras referentes a pobreza energética, conciliación familiar para mejorar la empleabilidad de los progenitores o tutores, aumento de la cobertura en las propias necesidades básicas…
¿Cuáles son las líneas de actuación?
Las líneas de actuación de esta Dirección General en políticas de intervención con menores y familias se vertebran en cuatro ejes: la lucha contra la pobreza infantil, la promoción de los derechos de la infancia, el derecho de los menores a vivir en familia, y las mejoras en la intervención con familias. Además, la intervención que debemos realizar con las familias para evitar situaciones de riesgo en los menores es indiscutible, y para ello el diseño de un Plan de Atención para Familias, Infancia y Juventud es absolutamente necesario y pretendemos que vea la luz a principios de 2017. Y para el 2017 serán también clave las campañas y actuaciones dirigidas a promover el derecho a vivir en familia, lo que tiene que ver con el trabajo que debemos realizar con las familias para favorecer el retorno de aquellos menores que fueron tutelados por encontrarse en riesgo, pero también con un impulso decidido para fomentar las familias de acogida y evitar la institucionalización de menores.
“Para 2017 serán también clave las campañas y actuaciones dirigidas a promover el derecho a vivir en familia y evitar la institucionalización de menores”
¿Y sus retos y objetivos a corto y largo plazo?
A corto plazo, promover las Ciudades Amigas de la Infancia y las familias de acogida, aumentar los programas de lucha contra la pobreza infantil y poner en marcha el plan de atención a familias, infancia y adolescencia. También, a corto y medio plazo, la adaptación de nuestros enfoques y procedimientos a la nueva normativa de protección de menores de 2015, que abarca cuestiones tan importantes como las adopciones abiertas o el papel de los menores a partir de 12 años en todos los procesos que les incumben.
Y a largo plazo creo que el reto más importante es la generación de un modelo de intervención conjunta entre las políticas sociales y el Servicio Extremeño de Salud para dar respuesta a los menores con problemas de salud mental y sus familias. No podemos hablar de un plazo demasiado extenso, primero porque la respuesta que estamos ofreciendo pasa en muchos casos por el desarraigo del menor de su entorno familiar hacia centros especializados fuera de Extremadura, lo que impide que hagamos de forma paralela un trabajo adecuado con las familias; y además, porque nuestra oportunidad sería tener un diseño claro para poner en marcha en esta legislatura.
En el tema de Infancia, ¿suele haber consenso en todos los partidos políticos?
Todo lo que tiene que ver con población vulnerable suele ser sensible a la sociedad en general, y aunque los enfoques o las formas de materializar las actuaciones pueda ser diferente, no debería ser difícil llegar a consensos.
“Aumentar los programas de lucha contra la pobreza infantil y promover las familias de acogida y las Ciudades Amigas de la Infancia son algunos de nuestros retos a corto plazo”
Cuando se habla de infancia en riesgo, ¿se habla también de familias en riesgo?
Los niños no viven solos, forman parte de una familia y por lo tanto la situación de riesgo, o bien se inicia dentro de la familia, o termina por afectar a todos los miembros de la familia y a su forma de relacionarse. La intervención debe ser integral, no sólo por detectar el foco del riesgo, sino porque si no provocamos cambios en todos los elementos se producirá una fisura que puede terminar con el fracaso de la intervención y con el mantenimiento o agravamiento de la situación de riesgo.
Cuando se trata de la infancia, ¿es fundamental la colaboración con la Administración?
Es imprescindible!!!!! El niño no le pertenece a nadie más que a su familia y no al sistema sanitario, educativo o social (o a todos). En cada caso debemos analizar qué esferas personales, familiares y sociales se encuentran afectadas por un riesgo, y la intervención tiene que ser sistémica y coordinada.
