Cáceres está muerta, si bueno, no

Si te viera Schopenhauer /
SERGIO MARTÍNEZ

Para aquellos que dicen que en esta ciudad no hay nada, que agoniza, que muere, les explico que en el breve espacio de un mes hemos tenido Extremadoc, El Festival de Blues, Foro Arte, La salita del cómic, el Irish Fleadh y la semana que viene el Pop Art. Además, grupos musicales de la ciudad como Fonal, Los Niños de los Ojos Rojos o Chloe Bird han presentado nuevo disco. Discos, por cierto, muy superiores en calidad a lo que se hacía en los ochenta. Hay mínimo diez bares que programan exposiciones de calidad y pequeñas editoriales de la ciudad que no paran de editar libros. Así que Cáceres está murta, bueno tal vez, como decía Raúl González Blanco, si bueno, no.

Y encima como fin de fiesta llega Horteralia. Es cierto, que esta ciudad no nos deja crecer ya que nuestra idea era hacer un mega festival en el Pabellón Multiusos y no sabemos bien por qué, no podemos. Ya que se llama Pabellón Multiusos, pero no tiene licencia, dicen, para actividades que no sean deportivas. Un sin dios vamos. No nos ha quedado otra que aceptar barco. El ayuntamiento nos ha facilitado otro espacio y allá vamos. Pero nos damos cuenta que si queremos que Horteralia crezca, y eso queremos los que lo organizamos, nos tendremos que marchar a otro lugar. Cáceres carece de un recinto dónde poder programar espectáculos en invierno para más de dos mil personas. Que alguien lo estudie por favor. Aunque ya me conozco la respuesta. Como decía Raúl González Blanco, si bueno, no.

Pero vamos a lo importante. Llega Horteralia. Llega el desmadre, el desenfreno, la risa y el carnaval de Cáceres. Horteralia es un ciclón, un vendaval de energía y de buen rollo. Horteralia es un festival sin igual en todo el territorio español. Y se hace en Cáceres, sí. Así que vamos a disfrutarlo. Vamos a reírnos de nosotros mismos, ponernos calcetines blancos, chaquetas de colores, dejarnos los bigotes, volver a cortarnos el pelo estilo tazón. Vamos a sacar las muñequeras, riñoneras y todo lo que acabe en era del armario. Vamos a teñirnos de rubio, a engominarnos, a sacar el chándal. Vamos, en definitiva, a reírnos como niños. Y es que Horteralia puede gustar o no, pero es el primer festival de España que reivindica otra forma de ser y vestir, sin vergüenza, out of fashion. El Festival más divertido del mundo. Y tenemos la suerte de que se celebra en Cáceres.

Yo estoy deseando que llegue el 28 de noviembre y ver a muchos cacereños llenos de color y con ganas de bailar. Y si Cáceres esta muerta. Al menos, morir bailando.