Los clientes de los comercios que abran este lunes no podrán utilizar los aseos. Esta es una de las medidas enmarcada dentro de la fase 0 de la desescalada. Además, se suprime el sistema de fichaje por huella dactilar para los trabajadores.
Así lo recoge la orden ministerial publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado (BOE), en la que se establecen las condiciones para la apertura al público de determinados comercios y servicios desde este lunes.
Así, desde hoy los establecimientos y locales comerciales minoristas y de actividades de servicios profesionales cuya actividad se hubiera suspendido tras la declaración del estado de alarma podrán abrir sus puertas al público, siempre y cuando no tengan una superficie de más de 400 metros cuadrados.
Así, esta fase 0 dictamina que no se podrán utilizar los aseos de los establecimientos y locales comerciales por parte de los clientes, «salvo en caso estrictamente necesario».
En caso de emergencia, se tendrán que desinfectar de forma inmediata los sanitarios, los grifos y pomos de las puertas.
Además, los establecimientos deberán garantizar una ventilación «adecuada». Deberán contar también con papeleras, a ser posible con tapa y pedal, en las que depositar pañuelos o cualquier otro material desechable. Las papeleras se tendrán que limpiar con frecuencia, al menos una vez al día y se tendrá que facilitar gel desinfectante a los clientes.
Medidas de higiene
En esta línea, los comercios deberán realizar, por lo menos dos veces al día, labores de limpieza y desinfección, prestando especial especial atención a superficies de contacto como pomos, mostradores, pasamanos o máquinas dispensadoras, entre otros.
Una de ellas tendrá que ser al termino de la jornada, la otra puede ser durante el transcurso de la misa. Lo recomendable es realizarla a medio día y tener una pausa dedicada a tareas de mantenimiento, limpieza y reposición.
El documento publicado en el BOE también recoge que los equipos de protección individual (EPIs) utilizados se desecharán de la forma adecuada. Asimismo, se tienen que desinfectar los puestos de trabajo en cada turno y se lavarán a diario los uniformes o la ropa utilizada para el trabajo.
Cita previa y sin salir del municipio
Para acudir a estos establecimientos hay que pedir cita previa. Además, hay que garantizar la permanencia en el local de un único cliente por cada trabajador, que deberá permanecer solo el tiempo necesario. Cabe destacar que está prohibido habilitar zonas de espera en el interior.
Los clientes solo se podrán desplazar a estos establecimientos si están dentro de su municipio, excepto si no hay algún producto disponible en su lugar de residencia. De esta manera, se podrán mover a otro, no necesariamente el más cercano.
De igual modo, se garantizará la atención individualizada al cliente con la debida separación física. Si esto no es posible, es necesario instalar mostradores o mamparas. Hay que subrayar que las personas mayores de 65 años tendrán atención preferente, que tendrá que coincidir con las franjas horarias en las que este colectivo puede salir a pasear, es decir, de 10 a 12 de la mañana, y de 19 a 20 de la tarde.
Con respecto a los trabajadores hay que aclarar que no pueden tener síntomas o estar en aislamiento por COVID-19, ni tampoco estar en cuarentena domiciliaria por haber estado en contacto con una persona diagnosticada o con síntomas de coronavirus.
No se ficha con huella
En esta Fase 0, los empleados deberán contar con los equipos de protección individual adecuados a su nivel de riesgo. A partir de hoy ya no se ficha con huella dactilar y este sistema se sustituirá por otro que garantice la seguridad y la higiene.
También se deberá modificar la disposición de los puestos de trabajo, la organización de los turnos y el resto de condiciones laborales. Así, los trabajadores podrán mantener la máxima distancia de seguridad interpersonal posible.
La distancia entre el vendedor y el cliente ha de ser de al menos un metro cuando haya elementos de protección y de dos metros si no hay. En el caso de servicios que no permitan esta distancia, como las peluquerías, por ejemplo, se tendrá que utilizar el EPI oportuno que asegure la protección tanto del trabajador como del cliente, «debiendo asegurar en todo caso el mantenimiento de la distancia de dos metros entre un cliente y otro».
Por su parte, en los comercios de ropa solo podrá haber una persona por probador. Este espacio será desinfectado tras su uso. Además, las prendas que no se adquieran tendrán que ser también higienizadas.
