El mito de las cigüeñas

La bruja Circe

Anda la primavera escalando las raíces de los arboles intentando acercarse al sol.

 Cuenta la leyenda que se despierta, cuando el sonido del crotar de la cigüeñas resuena en el aire. Por San Blas o las candelas, es decir, aproximadamente 40 días después del solsticio de invierno.

En la mitología y la cultura popular de muchas sociedades, desde antiguo, las cigüeñas son consideradas aves de buen augurio y se asocian con varios conceptos positivos, despiertan a la primavera, anuncian el buen tiempo y la renovación.

En la antigua Grecia, la cigüeña era sagrada un ave preferida de la la diosa Hera,  que era la diosa del matrimonio, el parto y la familia. Por eso el esos lugares  la cigüeñas era bienvenidas y saludadas con alegría y era vista como un símbolo de devoción y lealtad. Son aves de  comportamiento monógamo, sus parejas van regresan a los mismos nidos , para  hacer sus puestas.

En china, la cigüeña es considerada un símbolo de longevidad y buena fortuna. 

La cigüeña en el mundo de las hadas y los cuentos de muchas culturas europeas, donde se asocia con la entrega de bebés a sus hogares.

La cigüeña, a través de la historia, tiene un claro simbolismo espiritual, han sido reverenciadas en numerosas culturas y están asociadas con una serie de supersticiones.  En Europa se cree que las cigüeñas traen buena suerte y que el vuelo próximo de una cigüeña volando sobre tu hogar es un presagio de suerte y abundancia.

En muchos lugares se usan para predecir el tiempo, en otros piensan que pueden proteger a una casa contra los rayos en los lugares que anidan.

Estas creencias y supersticiones, quizás no sean científicamente exactas, dan una idea que éstas aves han permanecido en el imaginario popular en cuentos y están arraigadas en nuestra historia y cultura.