Cientos de personas han recorrido algunas de las calles del centro de Mérida en la manifestación del Orgullo LGTBI de Extremadura para reivindicar los derechos humanos y frenar el odio hacia el colectivo.
A las 20:00 horas partió la comitiva, encabezada por una gran pancarta en la que se podría leer el lema ‘Nos sobran los motivos’, desde el parque López de Ayala de Mérida. Luego, recorrió la avenida de Extremadura, calles Camilo José Cela y Félix Valverde Lillo, para terminar en la Plaza de España, donde se leyó un manifiesto. El colofón de la cita lo puso el concierto Rocío Saíz.
Entre los asistentes, con una gran presencia de jóvenes, se encontraba la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, y representantes de los sindicatos CCOO y UGT, que llevaban pancartas conmemorativas.
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La manifestación estuvo protagonizada por grandes banderas arcoíris, cartulinas con textos reivindicativos, cánticos contra la discriminación y el odio así como por la animación de una batucada.
En declaraciones previas al inicio del recorrido, la presidenta de Fundación Triángulo Extremadura, Silvia Tostado, indicó que este año el día del Orgullo es «tan necesario como siempre». No obstante, subrayó, en alusión al lema de la manifestación, que «sobran los motivos para salir a las calles a reivindicar igualdad y derechos, y sobre todo a frenar el odio».
Tostado quiso hacer hincapié también en que es «un momento crítico» en el que resulta «trascendental» decirle a quienes «cuestionan» los derechos de las personas LGTBI, sus vidas o su dignidad, que «no les tenemos miedo, que su odio no cabe» en los pueblos ni en las ciudades de Extremadura.
Por su lado, Pilar Milanés, presidenta de Extremadura Entiende, ha remarcado que «sobran motivos» para participar en la fiesta del Orgullo para esta aquí, pues hay que «seguir peleando para hacer frente a los discursos del odio».
Además, reclama que las personas LGTBI puedan «vivir una vida libre, digna, con respeto de toda la ciudadanía y de todos los derechos: igualdad, diversidad, inclusión…»
Con respecto a los casos de violencia hacia el colectivo, ha señalado que su organización tiene contabilizadas 36 agresiones o incidentes de odio que no han cursado demandas judiciales, y que la mitad de ellas ha tenido como víctimas a mujeres trans.
Por esta razón, considera que hay que poner el foco en esta cuestión, dado que se trata de «un colectivo vulnerable que sufre con virulencia todas la agresiones sociales hacia el propio colectivo».
