Las obras de Gran Vía y la Plaza de Toros están a punto de salir a licitación
San Juan. Archivo.

La peatonalización prevista por el ayuntamiento en determinadas zonas de la ciudad avanza, y en breve se darán nuevos pasos hacia su consecución, concretamente en este próximo mes de octubre, que será cuando el consistorio ha decidido iniciar la restricción parcial del tráfico en varias calles de la ciudad durante algunos días del fin de semana “con el fin de avanzar en la peatonalización del centro y fomentar la presencia de los viandantes frente a los vehículos”.

De momento, según anunció el portavoz municipal, Rafael Mateos, todos los sábados por la mañana, una vez concluyan los trabajos de carga y descarga, se cortarán la zona de la plaza de San Juan y las calles Obispo Ciriaco Benavente y Gómez Becerra. En el caso de esta última también se cerrará a la circulación los viernes por la tarde “para fomentar el comercio local”.

Mateos advirtió que la restricción del tráfico en estas vías, en los días señalados y a partir de octubre, será sistemática y no esporádica como se hacía hasta ahora para facilitar la celebración de algún evento. Se llevarán a cabo, añadió, con la colocación de vallas de la Policía Local, y no se podrá ni circular ni aparcar en estas calles durante los días y horas estipuladas.

Cierre total

En el caso de la calle Ciriaco Benavente, matizaría el portavoz municipal, se dará aún un paso más, pues a medio plazo se llevará a cabo una peatonalización total de la manzana que incluye también, además de esta calle, las vías Obispo Segura Sáez y Clemente Sánchez Ramos, de manera que toda la manzana desde San Pedro de Alcántara (ya peatonal) hasta la avenida Primo de Rivera “quedará permanentemente cerrada a los coches, salvo para residentes”.

Antes de esta peatonalización total, indicó Mateos, se llevarán a cabo trabajos de saneamiento de la red de agua por parte de la empresa concesionaria, y una vez que estos terminen, se procederá a realizar, con cargo al contrato de mantenimiento de las vías públicas y por fases, las obras de pavimentación y renovación del asfalto, “que se hará como una plataforma única a la misma altura, al igual que se hizo en la aledaña de San Pedro de Alcántara”.

Con todo, los responsables municipales confían en que el año que viene “sea una realidad” la peatonalización de toda esta zona, cuyos accesos se controlarán por cámaras de vigilancia, como ya ocurre en las otras calles peatonales

Se trata, incidió el portavoz municipal, “de que el peatón le gane el terreno al coche”, al tiempo que anunció, respecto a la calle Gómez Becerra, que tampoco se descarta su peatonalización total, “ya que se trata de una vía con bastantes comercios, de una sola dirección y aceras muy estrechas que hacen difícil el tránsito de viandantes”.

Fomentar el uso de la bici

Los proyectos de peatonalización forman parte del Plan Integral de Movilidad Urbana Sostenible (Pimus), que pretende reducir la presencia de coches en las calles de la ciudad para reducir la contaminación acústica y atmosférica, además de fomentar los hábitos saludables con el uso de transportes alternativos, como el servicio público de autobuses o las bicicletas.

Precisamente para fomentar el uso de la bici, el Ayuntamiento tiene previsto invertir de fondos propios unos 150.000 euros en la construcción de nuevos carriles para ciclistas en el centro de la ciudad, y en la estrategia europea de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (DUSI) también se contemplan otros 500.000 euros para el mismo fin.

Y además, el Consistorio cacereño se ha adherido a la campaña ‘Una bici más, un coche menos’, que se desarrolla en redes sociales para fomentar e uso de las bicicletas en las ciudades.

Artículo anteriorAvances en el proyecto de restauración de la muralla
Artículo siguienteCamino sin salida

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí