El jurado del XLV Premio Cáceres de Novela Corta, promovido por la Diputación Provincial de Cáceres, a través de su Área de Cultura, estará presidido por la escritora oscense Luz Gabás.
Luz Gabás se dio a conocer con su libro ‘Palmeras en la Nieve’ (2012), que contó además con una adaptación cinematográfica. También ha escrito las obras ‘Regreso a tu piel’ (2014), ‘Como fuego en el hielo ‘(2017) y su último trabajo ‘El latido de la tierra’ (2019), que mezcla diferentes tramas: una investigación policial, la despoblación y ciertos toques de romanticismo.
Este premio está dotado con 9.000 euros y además la Diputación Provincial se encarga de publicar la novela. Hasta la fecha se han recibido más de 130 obras cortas de autores y autoras provenientes de diversos puntos de España y del mundo, como por ejemplo Colombia, Argentina, Ecuador, Alemania, Venezuela, Cuba, Chile, Perú, México, Guatemala o Estados Unidos.
Un número que, con toda seguridad se incrementará «de manera considerable», puesto que se puede participar en el Premio Cáceres de Novela Corta hasta el 3 de abril, según recuerda la institución provincial en nota de prensa.
Fomentar la creación literaria
Este certamen tiene como fin fomentar la creación literaria. Conviene recordar que pueden participar personas de cualquier nacionalidad y edad. También están abiertos los Premios El Brocense de Microrrelatos, Flor de Jara de Poesía, Periodismo Dionisio Acedo, y Cuentos Ciudad de Coria. El fallo de los mismos se dará a conocer en la gala que tendrá lugar el 11 de junio en el complejo cultural San Francisco.
Luz Gabás es natural de Monzón (Huesca). Ha combinado durante años, su labor de docente de Filología Inglesa con la investigación lingüística, traducción y publicación de artículos.
En 2007 se mudó a Benasque, en el pleno Pirineo Aragonés, espacio que le ha servido de inspiración para su producción literaria y en el que ejerció como alcaldesa durante una legislatura.
Gabás tiene un apego muy fuerte al mundo rural, a la tierra, y así lo ha reflejado en su reciente obra ‘El Latido de la Tierra’ donde ha querido dar cabida y visibilidad al problema de la despoblación porque, según ha expresado en numerosas entrevistas, «aún cree que hay energía para reaccionar”.
