La librería de temática infantil y juvenil ‘Fábula’ abrió sus puertas hace un mes en la calle Amberes, 7, con ánimo cultural y para difundir la lectura en los niños. La librería-papelería cuenta con una ludoteca infantil donde despertar la imaginación y curiosidad de los más pequeños.

¿Cómo surgió la idea de este negocio?

Tomé la decisión de montar este negocio durante mi baja maternal, porque intuía que me despedirían cuando me incorporara y no me equivoqué. Siempre quise tener una librería, era un sueño que tenía desde pequeña, pero cuando comencé a informarme acerca del tema comprendí rápidamente que era necesario especializarse. Yo cursé estudios de magisterio e integración social, así que esa base ya la tenía y por eso me decidí a montar una librería infantil.

 ¿Cómo has conseguido financiarte? ¿Has solicitado algún tipo de subvención?

Con ahorros propios y con la capitalización del paro. Ahora he solicitado la subvención de ayuda al autoempleo —que son alrededor de 7.500 euros— y durante 30 meses me descuentan el 30% de la cuota de autónoma por ser mujer menor de 35 años. Pero no existen ayudas específicas para madre solteras, como es mi caso.

 ¿Ha sido complicado en tu caso montar este negocio?

Todavía siguen existiendo muchas trabas burocráticas para iniciar un negocio. Comencé a gestionar este negocio a través de la Ventanilla Única Empresarial (VUE) y del Punto de Activación Empresarial (PAE), en el Embarcadero, pero al final tuve que acudir a una gestoría, para solucionar la mayoría de los trámites necesarios. En el PAE me iban a adjudicar un tutor para orientarme en el tema de subvenciones, pero nunca llegó a materializarse esa ayuda.

 ¿Cómo está funcionando la librería?

La librería lleva solo un mes abierta, pero el resultado que estoy obteniendo no puede ser mejor. Afortunadamente, hoy en día tanto los padres, como los educadores están muy volcados en el fomento de la lectura en los niños. La población está muy concienciada con el tema de la animación a la lectura desde edades tempranas, para que los niños aprendan que la lectura es una actividad divertida, amena y provechosa. También tenemos lectura para adultos, porque a los padres y madres que vienen con niños a este espacio de recreo, también les interesa consultar libros de cocina, best-sellers en edición de bolsillo, etc.

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