“Las sombras que traerá la noche” del escritor y psiquiatra pacense Francisco J. Vaz Leal, ganadora del XLIX Premio “Cáceres de Novela Corta”. Ha sido, en este caso, el escritor Eugenio Fuentes, como presidente del jurado, el encargado de abrir la plica y desvelar el nombre. Ganador por una obra “que surge del amor a Pessoa, a Lisboa, a Portugal”, que de alguna manera homenajea “el juego de heterónimos “ y que aborda una pregunta clave de la literatura “quién somos cada uno de nosotros”. Un premio dotado con 9.000 euros y la publicación de la obra.
Presentada por la escritora y poeta Yolanda Castaño, con la actuación de Pepe Viyuela y amenizada con la música de Jazzeres Big Band, el auditorio del Complejo Cultural San Francisco, en Cáceres, acogía una de las galas más esperadas por el mundo de la cultura y del periodismo, a lo largo de la cual se dan a conocer los fallos de los premios literarios y periodísticos que anualmente convoca la Diputación de Cáceres.
En esta ocasión, se han recibido un total de 2.487 trabajos llegados de toda España y de cerca de 40 países. En el caso, por ejemplo, de la novela ganadora con el Premio Cáceres de Novela Corta “Las sombras que traerá la noche”, esta ha sido elegida entre un total de 605 novelas provenientes de 24 países.
Respecto al XLIV Premio de Periodismo Dionisio Acedo, a la que se han presentado un total de 21 trabajos, en la categoría de Prensa escrita, el galardón ha recaído en Marian Rosado por el trabajo publicado en El Periódico Extremadura titulado “Un mercado de bebés al otro lado de La Raya”. Un trabajo de investigación , ha dicho el presidente del jurado, el periodista Ignacio Escolar, que sigue una red que ofrece el servicio del llamado vientre de alquiler, de Ucrania a Suiza y llegando a Portugal, y en el que se muestra que “debajo de esa realización altruista se oculta un mercado de bebés”. Un premio dotado con 3.000 euros.
La categoría de Medios audiovisuales ha quedado, en esta ocasión desierta.
El XXVII Premio de Poesía Flor de Jara, este año ha sido para la argentina de origen judío Raquel Jaduzliver, por la obra titulada “Espiga de los días”, quien recibirá 6.000 euros además de la publicación de la obra. El presidente del Jurado, el poeta Jordi Doce, ha destacado que “es un libro con alma, con espíritu, atravesado por emoción, imaginación e inteligencia sensitiva”. Además, el jurado ha valorado que es un libro que plantea “un diálogo sostenido que funde la perfección y la meditación, con un lenguaje propio, personal, intenso y leve, con fluidez rítmica e intensidad imaginativa”.
Este año se han presentado 922 conjuntos de poemas, procedentes de España y de 31 países más.
Respecto a la XX edición de los Premios de Microrrelatos “El Brocense”, dirigido a alumnos de Educación Secundaria y de Bachillerato, este año se han recibido 551 trabajos de Extremadura, Andalucía,, Cataluña, Aragón, Murcia, Comunidad Valenciana, País Vasco, Baleares, Castilla La Mancha, Madrid, Asturias, Navarra, Canarias, Castilla y León, La Rioja, Galicia y Cantabria.
El poeta José María Merino, presidente del Jurado, fue el encargado de abrir cada una de las plicas, destacando la calidad de los trabajos de estos jóvenes escritores y escritoras. Los premios, 1.000 euros para los ganadores de ambos ciclos, y 500 euros para tres accésit de cada ciclo, además de 500 euros para los profesores que avalan cada trabajo fueron: el primer premio de Bachillerato para el relato “Joaquín y el mar”, de Mauro Puente, del IES Francisco Ayala de Madrid, y el primer premio de Secundaria para “Amaranta”, de Irene Pozo, del IES Padre Juan Ruíz, de Hinojosa del Durque, Córdoba. Respecto a los accésit de Bachillerato han sido premiados los alumnos Carmen Tato -“Hay una voz en mi cabeza”- del IES Rodríguez Moñino de Badajoz; Ana López de Ceballos -“El juglar”-, del IES Santa Marta, de Madrid y Roque Lara -“La ruta de siempre”- del IES Torres de Villarroel de Salamanca.
En Secundaria han recibido accésit los trabajos firmados por Lucas López -“El mensajero”-, del IES Ramón Areces de Grao, Asturias; Aitana Núñez -“El mariposario”-, del IES Profesor Hernández Pacheco de Cáceres, y Ánder Martínez -“Cocotorio”-, del IES Profesor Hernández Pacheco de Cáceres.
Esta nueva edición de los premios de la Diputación de Cáceres se completan con el que fue fallado el pasado miércoles en Coria, el XXXIV Premio de Cuentos Ciudad de Coria, que ha recaído en el costarricense Carlos Manuel Villalobos Villalobos, por su obra “Inferus”, de la que el presidente del jurado, el escritor Eloy Tizón, destacó que se trata de una obra integrada por “historias de terror con humor negro y crítica social; relatos inquietantes que pueden generar malestar y que se mueven entre lo insólito y lo mágico”, un trabajo, “que mantiene el nivel a lo largo de toda la obra”.
En este caso, la obra ganadora ha sido seleccionada de entre 388 recibidas, provenientes de 21 países.
2.500 trabajos llegados de 40 países
En su discurso, el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales, destacaba la importancia de una convocatoria cultural que ha reunido casi 2.500 trabajos, llegados de 40 países, y, en un discurso reivindicativo por la libertad de expresión y la necesidad de análisis, crítica y solidaridad, el presidente se refirió al “valor de la palabra, al valor del periodismo y de la literatura, de los creadores, que una vez más se vuelven a convertir, escritores, periodistas…, en blanco fácil si apuestan firmemente por la libertad de creación y son referencia a nivel nacional”.
En este sentido, afirmó que “desde la Diputación de Cáceres apoyamos y apostamos firmemente por la libertad de creación, y la muestra es que nuestros premios literarios y de periodismo cuentan con décadas de trayectoria y arraigo. Es un orgullo que en esta edición hayamos recibido casi 2.500 trabajos de cerca de 40 países. Esto me reafirma en mi idea de que las fronteras pueden y deben ser puentes de unión. Y lo decimos desde una provincia que tiene arraigo fundamental con los hermanos de Portugal”.
Morales quiso concluir con una llamada a “seguir visibilizando y transformando el mundo a través de la literatura y del periodismo; a seguir dando voz y espacio a los que no la tienen, a contar y sacar a la luz las historias de la gente, aunque duelan; a no dejar al encuentro casual el descubrimiento de lo que se quiso y se quiere convertir, como nos relata la escritora palestina Adania Shibli, en un detalle menor”. En este sentido, quiso recordar “las atrocidades que está viviendo el pueblo palestino, el genocidio sin sentido al que están siendo sometidos tantos hombres y mujeres inocentes”.