Más de 5.000 falantes resisten en Extremadura y desafían el paso de los años, pese a ser una lengua en desuso, que permanece atrapada en el tiempo.
Una lengua minoritaria del norte de Cáceres (en la Sierra de Gata) que tiene hasta tres variantes lingüísticas distribuidas en San Martín de Trevejo / Sa Martín de Trevellu (mañego), Valverde del Fresno / Valverdi du Fresnu (valverdeiru) y Eljas / As Ellas (lagarteiru).
El Gobierno regional declaró en 2001 A Fala, en sus tres variantes, como Bien de Interés Cultural (BIC), de carácter inmaterial y como tal recurso patrimonial está registrado en el Ministerio de Cultura.
Una lengua, en peligro de extinción, conocida entre sus hablantes como «A nosa Fala» o la Fala del Valle de Jálima y que surgió como una fusión entre el gallego y el portugués, por las tropas gallegas que defendieron la frontera con Portugal. De hecho, los gallegos todavía se sorprenden al encontrarse con una zona extremeña que habla el gallego del siglo XII.
Conservación
La Asociación Cultural ‘A Nosa Fala’, creada en 2014, pretende la conservación y difusión de esta lengua y, de momento, este año la Diputación de Cáceres destinará 148.400 euros a desarrollar actuaciones en el Parque Cultural Sierra de Gata, entre las que se incluye la puesta en marcha de un Centro de Estudios de A Fala, en San Martín de Trevejo.
Se ubicará en el edificio anejo a la torre campanario, que albergará también una biblioteca sobre A Fala, una sala de conferencias y otra para estudiosos del idioma de Us Tres Lugaris.
Parque Cultural Sierra de Gata
El Parque Cultural Sierra de Gata proyecta poner en valor todos los recursos turísticos y culturales que guarda la zona, como son el paisaje, la gastronomía, las construcciones civiles y militares y la filología que convierten a la comarca en un producto turístico más, muy atractivo para el visitante.
