El Pleno del Ayuntamiento de Cáceres ha aprobado este jueves de manera definitiva la propuesta para declarar la jota El Redoble como himno de la ciudad, lo que ha salido adelante con los votos de PP, PSOE y Vox, y la abstención de Unidas Podemos.
La iniciativa se impulsó en la anterior legislatura a través de una moción del alcalde Luis Salaya y el pasado mes de abril se aprobó por unanimidad la apertura del expediente pero en su aprobación definitiva se ha descolgado la formación morada, que se ha abstenido en la votación.
Ahora se inscribirá de forma oficial en el registro de símbolos, tratamientos y honores de las entidades locales de Extremadura dependiente de la Dirección General de Administración Local y se publicará en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) para su general conocimiento.
Al acuerdo se ha presentado una enmienda por parte del equipo de Gobierno para autorizar la utilización de El Redoble por parte de entidades públicas, privadas y particulares, siempre que «no haya modificaciones o alteraciones de la obra que supongan un perjuicio a sus intereses o menoscabo a su reputación».
Símbolo de unión intergeneracional
El concejal de Cultura, Jorge Suárez, ha defendido El Redoble «como un símbolo de unión intergeneracional» para que los jóvenes conozcan las raíces de la ciudad. Suárez ha explicado que la letra que se ha adoptado es la de Angelita Capdevielle tras el informe de la catedrática de la UEx Pilar Barrios que acredita el texto adoptado. Suárez ha pedido a Unidas Podemos que se uniera al sí porque El Redoble será «el himno de todos».
Sin embargo, la portavoz de Unidas Podemos, Consuelo López, ha alegado «dudas legales» sobre si habrá que pagar derechos de explotación como pasó con el himno de España que también es anónimo como la jota El Redoble. Bartolomé Pérez Casa efectuó unos arreglos musicales al himno nacional a principios del siglo XX y se tuvieron que pagar unos derechos hasta que en 1997 el Gobierno de Aznar decide «comprar» el himno por lo que tuvo que abonar 130 millones de pesetas a los herederos del arreglista por derechos de explotación.
Además, López ha planteado también la posibilidad de que El Redoble ya no pueda ser versionado ni utilizado por ningún otro grupo o asociación privada al considerarse un símbolo oficial de una ciudad, aunque la enmienda presentada trata de evitar este término.
Desde las filas del PSOE, el concejal David Santos Holguín, ha remarcado que «no es un himno de cátedra sino que la letra nace del pueblo» y «es un símbolo indiscutible de la ciudad»; mientras que el portavoz de Vox, Eduardo Gutiérrez, apoya la iniciativa porque «representa a todos los cacereños» y «los cacereños se identifican con El Redoble».
Medalla de la Ciudad
En la sesión plenaria de este jueves también se ha aprobado conceder al Orfeón Cacereño la Medalla de la Ciudad por sus 120 años de historia, que le será entregada en un acto oficial en noviembre, en una fecha próxima al aniversario de la declaración de Cáceres como Patrimonio de la Humanidad.
La propuesta ha sido aprobada también por PP, PSOE y Vox y con la abstención de Unidas Podemos al no estar de acuerdo con la metodología en los reconocimientos y distinciones que se otorgan desde el consistorio.
El Orfeón Cacereño nació en el año 1903, debutando el 13 de diciembre en el Teatro Principal, ubicado en la calle Peñas, lo que supuso un gran revulsivo que impulsó a la ciudad de Cáceres desde una perspectiva cultural. Dicha coral arranca con fuerza en 1964, figurando como primer director del grupo el maestro Francisco Cebrián Ruiz.
Su primera intervención, bajo su nombre inicial de Orfeón provincial y de la ciudad de Cáceres, tuvo lugar con motivo de la celebración del Patrón de San Jorge el día 23 de abril de 1965. Ha demostrado ser embajador de la cultura y de la ciudad de Cáceres en sus numerosas intervenciones en actos culturales, religiosos, institucionales y asociativos, no sólo a nivel nacional sino también fuera de nuestras fronteras.
Esta formación coral ha contribuido a lo largo de su historia al desarrollo de la sociedad cacereña. Destaca su presencia en certámenes internacionales, nacionales y provinciales, así como en festivales o en conmemoraciones como el Día de la Música, Otoños Musicales, Jornadas de la Hispanidad, Ciclos de Conciertos Navideños, Conciertos en las Fiestas de San Jorge, la celebración de Las Candelas o el Día de Extremadura, entre otros.
Ha cosechado innumerables triunfos y galardones, destacando la Medalla de Extremadura en 2017 como coral decana de la música coral polifónica extremeña y por el carácter altruista de esta formación. También ha sido distinguida con el premio ‘Extremeños del año’ de la Cadena Ser en 1997 e ‘Importantes de Extremadura’ en 1980 por la Asociación de la Prensa.
