La bruja Circe
Dice un refrán popular, marzo ventoso y abril lluvioso hacen a mayo florido y hermoso.
El mes de marzo estaba dedicado a Marte dios de la guerra, lo que da miedo en las actuales circunstancias, pero Marte no siempre fue una divinidad guerrera.
En sus orígenes simbolizaba la agricultura y la fertilidad. Sin duda mucho más importante que la guerra porque trae la alimentación, salud y la vida misma. Esperemos que este año Marte se despida de los belicosos y se ponga de parte del equilibrio y de la agricultura que buena falta le hace y así la tierra genere los alimentos necesarios para poder sustentar a todos
El mes de marzo espiritualmente significa también una época en la que se desarrolla la parte más sabia y espiritual de las personas. La fertilidad se observa claramente en animales como los conejos y las liebres que andan locos por estas fechas
Muchas fiestas antiguas en este mes, las Calendas de marzo era la fiesta de las mujeres casadas o Matronalia. Los esposos hacen regalos a sus mujeres y se celebran banquetes. Las fiestas del Navío de Isis.
En este día se reanuda la navegación, cuya divinidad tutelar es la diosa Isis. En la fiesta en honor de la Diosa, los Sacerdotes y fieles se dirigían en procesión al puerto, en medio de músicas y cánticos entregando una urna con agua del Nilo.
Se botaba al mar un navío lleno de objetos preciosos, tras rociarlo con leche lo abandonaban a merced de las olas, creo que todos los buscadores de tesoros, estarían encantados de encontrar alguno de ellos.
Y hoy el día el día ocho en la que celebramos y reivindicamos el Día de la mujer y coincide con otra fiesta antigua la boda entre Ariadna de Creta y el Dios Dionisos, llamado, dice a su nueva esposa; «Vayamos juntos a los más alto de los cielos te llamarás Líbera». Lo que es bastante simbólico porque ella elige una vida nómada de alegres, bacanales y pasa de la seguridad y la norma establecida.
Una experiencia que ha tardado mucho tiempo en reproducirse porque la libertad de escoger le ha sido negada a la mujer en todas las culturas, sea en asuntos de trabajo, en cuestión de las relaciones o el gobierno de su propia vida o gustos.
Os deseo un feliz marzo y que los dioses de la guerra duerman con el aroma de las flores y los inciensos.
