LA BRUJA CIRCE /
La navidad se eligió como cumpleaños de Jesús por los cristianos, aunque se ignoraba la fecha exacta, porque los pueblos agrícolas, todos los conectados con las culturas rurales, ya celebraban en esos días la entrada del invierno. Es una forma de simbolizar la esperanza de que algo nuevo crecerá y nos llenara de bienes. Una luz y una esperanza para cuando termine el invierno.
Entre los celtas, en esos días en que las gentes y la naturaleza se recoge y se prepara a pasar los días del invierno se invocaban alegres colores para mantener la esperanza y la armonía. El rojo para atraer la suerte que representa la sangre de la madre es decir la vida y la fuerza vital, el amarillo y dorado símbolo del oro que representa todo lo que consideramos un tesoro y todo lo que aporta a nuestra vida comodidad y bienes materiales, el verde que representa la esperanza de que todo lo que no hemos propuesto se cumpla, se adornaban ramas y troncos. De esas viejas ramas adornadas he tomado la idea y realizado yo mis amuletos de la suerte para este año, para atraer la suerte abundancia y alegría al que lo lleve y a quien lo regale.
Para atraer lo bueno adornad la casa con cintas rojas y doradas poned alguna planta que tengáis o un arbolito, que represente a la naturaleza, adornado con esos colores y no olvidéis poner antes del día 22 los amuletos que halláis adquirido para vosotros o para regalar o las piedras, joyas o amuletos, que tengáis.
Las piedras y joyas irían muy bien sobre una capa de arena seca o colgadas bajo las plantas. Puede ser una maceta o un árbol. Colocáis uno cestitos llenos de frutas, de gominolas que simulen las frambuesas y arándanos, un bote pequeño de barro o cristal con monedas de chocolate para compartir con los visitantes y atraerán a los duendes y uno o dos platitos con semillas que entregareis en la navidad a los pájaros. Si tenéis animales, recordad incluirlos. Cuando entregáis unos de los regalos decid o al menos pensar, “que este regalo o golosina te traiga bien a ti a los tuyos y a quien lo trabajo y a quien te lo regalo”. Con esta frase agradecemos tener las cosas, manifestamos respeto por el trabajo que suponen y, enseñamos a los niños a agradecer el esfuerzo de los demás y su generosidad. Cada día recogéis las semillas y las dais a los pájaros sean en el campo o en la ciudad recordad que siempre hay gorriones y palomas, agradeciendo a la tierra sus bienes. Eso multiplicara los bienes en nuestra vida. Os deseo mil felicidades.
