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Pantalla /
Eduardo Villanueva

Es fácil imaginarse a Pedro Sánchez (Pdr Snchz) como un Gary Cooper (más joven pero con similar percha) esperando la hora para acudir al Comité Federal celebrado el pasado sábado; solo ante el peligro.

Pdr llegó con el ajetreo propio de un partido en profunda descomposición. Después de aguantar que una serie de supuestos barones le robaran protagonismo durante semanas, y el jefe de la rosa marchita, Felipe, se despachara a gusto en el diario de Cebrián.

Solo desde este prisma se puede entender el posicionamiento de algunos voceros del PSOE, más preocupados en citar hora, padrinos y arma (con la diferencia de que aquí no hay pistolas, si no cuchillos bien afilados) que en realizar una lectura de los resultados del 26J, toda vez superado el no-sorpasso de Unidos Podemos.

Todos están tomando posiciones de cara al próximo congreso, donde se decidirá el nuevo liderazgo de un partido en la encrucijada. Todos desfilan por las pantallas de televisión haciendo alarde de su dialéctica más o menos barata, mientras Rajoy continúa ganando tan ricamente su sueldo en funciones, sin apenas mover ficha.

Resulta curioso que la noche electoral del 26J Fernández Vara no hiciese una valoración del resultado en clave regional. Le dejó ese entuerto al portavoz Morales, que tuvo que hacer de prestidigitador numérico para obviar la evidencia: el PP retoma el liderazgo en la región y el PSOE pierde votantes.

Le faltó tiempo a Vara para dar una rueda de prensa al día siguiente y desviar el debate de los resultados regionales para hablar en clave nacional. Su mensaje: había que facilitar el Gobierno del PP. De la contraprestación exigible por una hipotética abstención del PSOE no dijo ni pío…

Aquí cada uno barre para su casa y cuenta la feria según le va. Porque podríamos concluir que el señor Vara aboga por un gobierno del PP, no porque perteneciese en su día a Alianza Popular (todo el mundo tiene derecho a reinventarse), sino para garantizar su gobierno en minoría en Extremadura.

Porque, ¿quién ha desbloqueado los presupuestos de 2016 en la región? El voto del PP de Monago. ¿Quién garantiza la continuidad de Vara, que no ha conseguido aumentar diputados después de pasar cuatro años en la oposición? El PP de Monago. Todo cuadra. Todo encaja. No es una cuestión de ideologías, es una cuestión de no perder el sillón; el poder sobre el cortijo.

Ya veremos en cómo se resuelve esta especia de Día de la Marmota en el que nos encontramos inmersos. De momento, suerte, Pdr, porque tu telegenia no te facilitará el ‘happy end’ que Gary Cooper sí tuvo en ‘Solo ante el peligro’.

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