TOMA_DE_POSESION_05

Lunes de papel /
Emilia Guijarro

El discurso de investidura siempre es el más importante de una legislatura. En el se plasman las medidas y promesas que el candidato a presidente ofrece a la ciudadanía y a la oposición. Los discursos de Juan Carlos Rodríguez Ibarra se basaban en dos premisas: la modernización de Extremadura y que nadie se quedara atrás, que no hubiera una dualización de la sociedad.

El discurso de Guillermo Fernández Vara ha sido el de seguir cuidando a la gente que nos necesita, con diálogo, consenso y humildad, pero también el de exigir a los gobiernos Central y Europeos que no nos dejen solos, porque solos no podemos alcanzar las metas de la dignidad. No puede un partido solo, ni su líder, tirar del carro de una región, y más cuando es carro tiene las ruedas desinfladas. Guillermo ha prometido 60 medidas, que llevó ante notario, y en esas medidas se ven reflejados todos los colectivos, pero especialmente tres, que junto con la clase media, han soportado las secuelas de la crisis.

Ahora es la hora de Guillermo y de Extremadura, para gobernar con vacas gordas todo el mundo vale

Los jóvenes, a los que un buen día les desaparecieron las becas, el transporte escolar; le impusieron la LOMCE; les dejaron sin trabajo, pero con una maleta en la mano, y les señalaron la puerta de salida.

Los mayores, a los que impusieron un vergonzoso «copago farmacéutico» y deterioraron tanto el sistema sanitario, que se ha traducido en una merma de su esperanza de vida. Las personas con dependencia, a los que se les ha recortado las prestaciones económicas, se les ha dejado morir en lista de espera, se les ha bajado de un día para otro el grado de dependencia, como si su estado fuese a mejorar, y se les ha rebajado el número de horas de atención domiciliaria.

Las 60 medias tienen un coste económico que nace lastrado por la deuda que mantenemos con el Gobierno, por eso no nos pueden dejar solos. Extremadura tiene que tener un régimen fiscal que no le perjudique, porque a la rueda de nuestro desarrollo le falta todavía aire para circular por la carretera.

Ahora es la hora de Guillermo y de Extremadura, para gobernar con vacas gordas todo el mundo vale. Lo que verdaderamente pone a prueba a los gobiernos y a sus líderes es gobernar con estrecheces financieras.

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