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Historias de Plutón /
José A. Secas

En sintonía con los tiempos, con las tendencias y con mi propio talante y carácter batiburríllico, voy con un nuevo cóctel literario-gazpachero que, en esta ocasión y al igual que otras pocas (muchas) veces, pretende dejar un poso de buenrollismo que aspira a concienciar sobre nuestro derecho, obligación y destino a amar y ser amados. Nada; una tarea baladí. Ya tu sabeh, mi amor. Beberé de los pensamientos de miembros de mi familia con los que comparto, por educación y cultura, valores y principios; y con los que me identifico y respaldo en sus opiniones hasta apropiarme de ellas para hacer pedagogía y proselitismo. Casi na. Muchomorrismo ilustrado.

Empiezo con Titocayo que está más que aburrido de la actitud de los políticos actuales. Yo creo que refleja muy bien una opinión generalizada que, también y lamentablemente, actúa como espejo de una sociedad contagiada por el pesimismo, la cutrez y la cicatería de miras. La política en general y las negociaciones más recientes de los políticos en particular, “no son transparentes y no se habla con sinceridad y espontaneidad” y añade que “la confrontación como estrategia perpetúa, los conflictos, los bandos irreconciliables y las ganas de revancha” no nos van a llevar muy lejos… La pregunta que lanza, que comparto y respaldo, deja claro el espíritu positivo que compartimos en la familia: “¿Por qué no se trabaja desde todos los lados para mejorar, para sumar, para incluir, para desactivar los conflictos en lugar de enconarlos?” Con gente como ellos y como tú, podremos mejorar el mundo.

La sister Norci ha decidido canalizar su energía vital de tal modo que no se desperdicie y se pierda en manifestaciones inútiles, negativas e incluso contraproducentes y dañinas de desamor. Mantiene la sabia teoría de que juzgar, criticar negativamente, chismorrear, levantar falsos testimonios y mentir sobre los demás, genera tal cantidad de mal rollo (general, expansivo, multilateral) y absorbe tanta energía que hace daño al alma y al cuerpo. Ese sentimiento de mirar inquisitivamente a los demás y valorar su actitud, estar pendiente de ella, establecer “líneas rojas”, hacer comparaciones y terminar condenando (la mayoría de las veces), solo resta energía imprescindible para vivir sano y feliz. “Vive y deja vivir” y, como dijo Unamuno “Allá cada uno”.

Por último, el brodel K, ha desarrollado la teoría “Simple-RAS” que, hilando fino, pretende demostrar la influencia de la repetición y automatización de pensamientos positivos y bienintencionados, hasta cruzar la frontera de la inconsciencia para hacerlos hábito y así, influir en la biología (salud y bienestar) mediante la generación, consciente, de emociones y sentimientos agradables, optimistas, amorosos… Su receta es muy simple: respira profundamente (R) con ánimo relajante y de plenitud, cierra los ojos y genera un pensamiento de agradecimiento (A). Da las gracias a todo; en general, y siéntete dichoso por ello. Consecuentemente, sonríe (S). Dibuja la sonrisa en tu cara. Si, hazlo. Si repites la fórmula “Simple-RAS» (caiga quien caiga y te pille donde te pille) cada media hora, vas a ser más feliz y te resultará más fácil amar sin complejos. Compruébalo y me cuentas.

 

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